SYDNEY, 5 mayo (Reuters) – El banco central de Australia advirtió el viernes de que los riesgos para la inflación eran al alza debido al bajo crecimiento de la productividad, la subida de los precios de la energía y el aumento de los alquileres, ya que el crecimiento de la población supera todas las expectativas.
En una declaración trimestral sobre política monetaria, el Banco de la Reserva de Australia (RBA) reiteró que los tipos de interés podrían tener que subir más para contener la inflación, tras haber sorprendido a los mercados esta semana con su undécima subida al 3,85%.
Aunque el RBA creía que la inflación había tocado techo a finales del año pasado en el 7,8%, sólo se preveía que volviera a la parte superior de su banda objetivo del 2-3% a mediados de 2025. Se trataba de una trayectoria más lenta que en muchos otros países desarrollados, y los riesgos se inclinaban al alza.
“La inflación podría resultar más persistente si el crecimiento de la productividad sigue siendo débil, el entorno de alta inflación lleva a las empresas a ampliar sus márgenes a medida que sus costes se reducen, se produce una mayor retroalimentación entre el aumento de los precios y los salarios de lo esperado, o si los alquileres aumentan más de lo previsto”, dijo el RBA en el informe de 79 páginas.
Los mercados apuestan por que éste sea el punto álgido de los tipos, en parte debido a la renovada volatilidad del sector bancario estadounidense, mientras que una escasa mayoría de economistas encuestados por Reuters espera una última subida de tipos para septiembre.
El Banco de la Reserva de Australia prevé que la inflación subyacente se reduzca hasta el 4,0% a finales de este año, frente al 6,6% actual, y hasta el 2,9% a mediados de 2025.
La inflación de los alquileres es cada vez más peligrosa debido al aumento de la inmigración, y aumentará “significativamente” la inflación en los próximos dos años.
La subida de los precios del gas y la electricidad también se sumaría a la inflación este año, y existe el riesgo de que las empresas opten por ampliar sus márgenes a medida que se reducen los costes, en lugar de recortar los precios.
“Cuanto más tiempo se mantenga la inflación por encima del objetivo, mayor será el riesgo de que aumenten las expectativas de inflación y de que la fijación de precios y salarios se ajuste en consecuencia”, declaró el RBA.
“Si esto ocurriera, el resultado final sería unos tipos de interés aún más altos y se necesitaría un mayor aumento del desempleo para que la inflación volviera al objetivo”.
Se espera que el crecimiento salarial anual alcance un máximo del 4,0% a finales de este año, frente a la previsión anterior del 4,2%, antes de reducirse al 3,7% a mediados de 2025.
Se prevé que la tasa de desempleo aumente hasta el 4,5% a mediados de 2025, frente al 3,5% actual.
Todas estas previsiones se basan en el supuesto técnico de que los tipos de interés alcancen su nivel máximo en torno al 3,75% a mediados de 2023, antes de volver a bajar a alrededor del 3% hasta junio de 2025.
Source: INVESTING