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Los precios del oro se consolidaron cerca de los máximos recientes el viernes, ya que el sentimiento de los inversores se deterioró debido a las renovadas preocupaciones del sector bancario después de que las acciones del gigante alemán Deutsche Bank (ETR:) se desplomaran más de un 10%.
En el momento de escribir estas líneas, el precio al contado, , cotiza en la zona de los 1.995 dólares la onza, prácticamente sin cambios en el día. Esta semana, el metal amarillo intentó en dos ocasiones superar la barrera psicológica de los 2.000 dólares, pero no lo consiguió, tras registrar un máximo de un año de 2.009 dólares.
El viernes, los valores bancarios europeos sufrieron fuertes pérdidas, encabezadas por las acciones del Deutsche Bank, que se desplomaron más de un 10% por un repunte de los swaps de incumplimiento crediticio. El entorno de aversión al riesgo favoreció al dólar en general, lo que ha limitado la subida del XAU/USD.
Los precios del oro superaron los 2.000 dólares esta semana después de que la Reserva Federal anunciara una “subida moderada”. A pesar de que el FOMC subió los tipos en 25 puntos básicos, como se esperaba, el banco central abandonó el “hawkish forward guidance”. Además, el gráfico de puntos sugiere que la mayoría de los miembros del FOMC prevén sólo una subida más de 25 puntos básicos este año.
Desde una perspectiva técnica, el panorama del XAU/USD sigue siendo alcista, según los indicadores de los gráficos diarios y semanales. Sin embargo, los indicadores semanales han perdido impulso alcista, dado el fracaso del XAU/USD para consolidarse por encima de $2,000.
Se necesita una ruptura decisiva de este nivel para allanar el camino al alza, con el próximo objetivo alcista en el máximo de marzo de 2022 de 2.070 $ y la zona de 2.100 $. Por otro lado, el siguiente nivel de soporte se sitúa en la antigua resistencia de Fibonacci en 1.970 $, seguida de la zona de 1.900 $, donde la SMA de 20 días converge con otro nivel de retroceso.
Source: INVESTING
