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Las criptomonedas deben alcanzar la adopción masiva para liberar su máximo potencial como tecnología de red y su valor como activos financieros.
Como ocurre con otras tecnologías, la adopción de las criptomonedas sigue una curva de campana clásica: Empezando por un pequeño número de innovadores, crece a medida que los primeros en adoptarla la adoptan, pasando a la adopción masiva a medida que se expande a la mayoría temprana y tardía. Por último, llega a los rezagados en su fase final.
Desde su lanzamiento hace 14 años, la adopción de Bitcoin (BTC) ha aumentado drásticamente. La criptomoneda ha pasado de ser una tecnología marginal discutida por un pequeño grupo de cypherpunks y nerds a ser conocida en todo el mundo, con algunos estados-nación incluso adoptándola como moneda de curso legal.
Sin embargo, según la mayoría de las estimaciones, la tasa de adopción global de la criptomoneda sigue siendo de un solo dígito, lo que significa que todavía se encuentra en la fase de “mayoría temprana” de la adopción global.
Para seguir creciendo y alcanzar una verdadera adopción masiva, el cripto tendrá que superar el “abismo”, la brecha que separa a los primeros adoptantes de la mayoría temprana. Para ello, pueden ser necesarios ciertos catalizadores.
¿Cuáles son esos catalizadores y cuánto le falta al cripto para alcanzar la adopción masiva? Para averiguarlo, no se pierda el último Informe Cointelegraph en YouTubey no olvide suscribirse.
Source: COIN TELEGRAPH
